
¿Tienes alma?, ¿a veces piensas que es un peso que llevas arrastrando?, si pudieras, ¿te desharías de ella?, ¿qué forma crees que tiene?, ¿qué harías si descubrieras que tu alma tiene la forma de un garbanzo?
Todas estas preguntas son abordadas en la película estadounidense de nombre Cold Souls (Sophie Barthes, 2009). Desconozco si ya fue estrenada en México (o si algún día será distribuida en las salas del país), pero, invadiendo un poco y sólo temporalmente los dominios de La Sala, hablaré de ella.
Nominalmente se trata de una comedia, confirmado con la presencia de Paul Giamatti (Sideways, Big Mamma´s House, Cinderella Man). Giamatti se interpreta a sí mismo en un papel que recuerda a los buenos tiempos de Woody Allen, con un personaje igual de neurótico, ansioso, apático y depresivo. El resultado son pocas, pero muy bien logradas, secuencias cómicas dentro de un argumento semi lento de humor negro.
El argumento de la película puede parecer fantasioso pero sirve para hacer una reflexión profunda sobre el valor que damos a lo espiritual en una sociedad tecnificada. La discusión sobre la existencia del alma y las consecuencias de venderla y/o perderla ha sido abordada hasta el cansancio, incluso hasta por los Simpsons. Si el alma pudiera ser extraída y reimplantada al cuerpo a placer, ¿lo intentarías?; y si existiera un mercado negro de almas ¿aún así te arriesgarías?; y todavía más importante, ¿hasta dónde estarías dispuesto a llegar para recuperarla?
No pretendo recomendar esta película, eso es tarea de otros blogs. Mucho menos me voy a acabar a esta película a punta de críticas, arruinando la emoción de otros. Ese papel ya lo escogió Jaime. Yo únicamente espero compartir con ustedes mi reflexión sobre una película que, feliz e inesperadamente, se coló, apenas este fin de semana, dentro de mis tres películas favoritas. Toda una grata sorpresa sabatina de Semana Santa. Como un plus a lo buena que me pareció la cinta, para mí jamás pasará desapercibida una película que muestra a Lauren Ambrose, al menos por unas pocas escenas (sí, aunque sea pelirroja).
Por su atención muchas gracias.