(Se acabó. Y habrá una foto para dar fe a las generaciones futuras que hubo un día en el que todos y (como me obliga la moda en el discurso) todas se peinaron. Incluido yo, desde luego.
Sábado 11 de septiembre. ¿La elección del día fue casual o alguien fraguó todo desde la oscuridad de alguna elite? El caso es que ahí tuvieron a casi de 200 pseudo-internacionalistas (unos más, otros menos), en el aniversario del día que “cambio el orden internacional”, posando, echando goyas y haciendo olas. Todo siempre con amenaza de lluvia. ¡Menuda suertecita!
Si no estuvieron presentes, ahí les va el resumen.
- Matus sí fue. La sensación como siempre. Hasta que alguien insinuó que era su familia la que estorbaba para la foto.
- Pippi sólo apareció por sus ansias de protagonismo. Ahora puede contarle a sus nietos (seguramente omitirá los detalles sobre sus pecas y su timidez) que una vez, en su juventud, una muchedumbre coreo su nombre. Vivió por unos segundos el sueño de cualquier aspirante a futbolista o político demagogo. Ya sólo le falta escribir un libro, tener un hijo y plantar un árbol para, algún día, morir tranquila.
- Muchas ausencias. Quizá entre las más importantes la de las compañeras hoy en intercambio. También Yoko, Mojarra, Toterman/chicles/Ramsés, Orlando “La leyenda” y muchos otros personajes que ni dibujados saldrían tan cómicos. Pensándolo bien, tal vez así fue mejor.
- Los matutinos conocieron a los vespertinos y viceversa. No hubo mayor emoción, sólo caras de extrañeza. Unos porque vieron a Pol y los otros porque hicieron lo propio con… bueno, no se me ocurre nadie que iguale, digamos, el “tipo” de Pol.
- Finalmente, las fotos alternativas. Fuera de la formalidad, el escudo de la estola del lado izquierdo, la borla peluda del birrete de lado correcto y las sonrisas acartonadas y entumecidas hubo máscaras, pirámides, letreros, muecas, sonrisas y mucho Pol -¿otra vez?-. Claro, todo eso en las fotos chidas. En las de ustedes no sé.
Si no fueron o no fueron preparados para llevarse muchos recuerdos de esa tarde, recuerden que siempre está el posgrado o una segunda carrera. Quién sabe, igual y en esa si la armen
P.D: ese día si muy sonrientes, ¿no? a ver si se sonríen igual cuando el día de mañana compitan por el mismo puesto.)